Tanto en la vida del hombre como en la del pez, el saber fluir es elemental para superar turbulencias y llegar a aguas tranquilas y serenas.
Tal y como lo indica su nombre, es una carta donde lo predominante es la figura de unos peces nadando en un río los cuáles pueden variar dependiendo de la versión de la baraja pero que usualmente muestra algunos peces koi. Estos peces son además símbolos de la buena fortuna y de equilibrio. En cuanto a su ubicación, por lo general, los vemos en estanques o riachuelos rodeados de mucha flora y ambientes agradables que expresan bien el positivismo de la pieza.
Significado de la Carta 34 Lenormand: Los Peces
- Tendencia: Positiva
- Carta Relacionada: Rey de Diamantes
Estos peces son y se ven bastante amigables. En otras palabras, se trata de un carta por la que cualquiera podría alegrarse tras ser levantada del reverso durante una lectura de Lenormand. Especialmente por ser un gran indicativo de que muchas cosas están por mejorar próximamente. Aunque esta posibilidad no deja de estar prelada por las decisiones del consultante.
Conforme antiguas amistades se van alejando, nuevas y perdurables irán naciendo. Aquí es importante recalcar la gran posibilidad de que estas nuevas amistades además representen el nacimiento de nuevas asociaciones para emprender proyectos muy positivos, que dependiendo del valor que cada uno pueda aportar, podría ser muy gratificante para todos los involucrados.
Las relaciones con la familia fluirán hacia aguas cristalinas y agradables donde el compartir de ideas, opiniones y visiones sobre diferentes aspectos de la vida, estarían marcados por el respeto y el apoyo mutuo. Esta placentera época familiar también sería el aliciente para el regreso al hogar de un miembro importante que se había alejado por problemas del pasado.
Con la misma gracia, elegancia y serenidad de un koi, podrá nadar el consultante por las complicadas aguas del amor. Un nuevo noviazgo o la oportunidad de contraer matrimonio con la persona que ama es algo muy probable que traiga la corriente de los ríos del destino a la vida de quien consulta sobre su presente y futuro y que a la vez es bendecido con la presencia de esta carta.
Muchos trabajos podrían negarse, sin embargo, esto no es necesariamente algo negativo sino más bien una invitación a emprender un negocio propio y aprovechar al máximo las oportunidades que muy pronto la vida pondría sobre la mesa. Ahora bien, más que la llamada mentalidad de tiburón, lo que realmente hay que tener es la astucia de un pez que espera a que las condiciones sean óptimas para nadar de manera eficaz hacia sus objetivos.
Quizás la mayor de las buenas nuevas sea el augurio de una buena estabilidad económica, producto de los fructíferos dividendos que comenzarán a generar aquellos emprendimientos hechos a corto plazo así como por las posibilidades de acceder a cargos importantes dentro de empresas de renombre.
Sabemos bien que no todo en la vida es color de rosa o igual de brillante que bellos y pintorescos peces en las peceras. Y es que en el ámbito de la salud se podría esperar efectos adversos por enfermedades relacionadas al hígado. Es por este motivo que cuando sale esta carta, se recomienda cuidar mucho la alimentación y evitar al máximo las sustancias que puedan dañar este órgano.
Comúnmente se ve a los peces como símbolos de equilibrio. Es por ello que esta carta pone su dedo índice justamente sobre la intención de tratar de alcanzar la paz interior siempre. Después de todo solo estando en paz con nuestro entorno y con nosotros mismos podremos realmente encontrar la belleza que hay en equilibrar nuestras energías, deseos y sentimientos para alcanzar la plenitud espiritual.